La maldición de Béla Guttmann está más vigente que nunca y dejó al Benfica portugués sin corona europea una vez más. Los de Lisboa no pudieron ante el Sevilla y en definición por penales perdió 4-2, cayendo por segunda vez consecutiva en la instancia definitiva de la Europa League. El cuadro luso experimentó un verdadero dejavú en Turín y tal como el año pasado (cuando cayó ante Chelsea) se quedó con las manos vacías pese a realizar un buen papel y llegar en condición de invicto a la final del torneo.
En la primera parte, el cuadro rojo perdió a Sulejmani tras una artera falta del sevillista Moreno que le produjo una lesión en el hombro, quedando así afectado su poderío ofensivo. Ambos equipos tuvieron ocasiones de gol, pero las más claras fueron para el Benfica. Sin embargo, los portugueses no tuvieron recompensa y el encuentro finalizó 0-0. Los treinta minutos de prórroga también terminaron sin goles y obligaron a que el torneo se defina en penales. Cardozo y Rodrigo fallaron y el cuadro andaluz se coronó campeón al anotar sus cuatro remates desde los doce pasos.
En la primera parte, el cuadro rojo perdió a Sulejmani tras una artera falta del sevillista Moreno que le produjo una lesión en el hombro, quedando así afectado su poderío ofensivo. Ambos equipos tuvieron ocasiones de gol, pero las más claras fueron para el Benfica. Sin embargo, los portugueses no tuvieron recompensa y el encuentro finalizó 0-0. Los treinta minutos de prórroga también terminaron sin goles y obligaron a que el torneo se defina en penales. Cardozo y Rodrigo fallaron y el cuadro andaluz se coronó campeón al anotar sus cuatro remates desde los doce pasos.
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