Real Madrid cumplió su trámite y se clasificó para los cuartos de final de la Champions League con un fácil triunfo 3-1 ante el Schalke 04 en un partido que quedó para el lucimiento de Cristiano Ronaldo, autor de dos goles. Lo peor fue la grave lesión de Jesé, el joven valor de la cantera del Real Madrid. A pocos minutos de iniciada las acciones se golpeó con Kolasinac y su rodilla pagó las consecuencias. El diagnóstico es lamentable: rotura del ligamento cruzado anterior y al menos seis meses fuera de las canchas.
La salida de Jesé propició la entrada de Gareth Bale, uno de los futbolistas más destacados del Real Madrid. Aprovechó las carencias de Kolasinac para abrir varios agujeros en la defensa alemana. Una asistencia suya propició a los 21 minutos el primer tanto local, anotado por el infalible Cristiano Ronaldo. El equipo blanco se relajó en el segundo tramo de la primera mitad y el Schalke 04 lo aprovechó no sólo para acaparar la posesión, sino también para igualar. Marcó a los 30 minutos, en un tiro lejano de Tim Hoogland que Sergio Ramos desvió. Suficiente para despistar a Iker Casillas, que se quedó clavado.
El segundo tanto blanco ocurrió a los 74 minutos en la enésima maravilla de Cristiano Ronaldo. El portugués enfiló hacia el área desde el centro del campo, un defensa no pudo tirarlo a pesar de sus esfuerzos y el delantero marcó con un misil propio de sus características. Fue su decimotercer gol en la presente edición de la Liga de Campeones. Además, cuenta 41 tantos en esta temporada. Y el tercer gol local llegó al minuto siguiente, en otro contraataque que concluyó con disparo al larguero de Cristiano Ronaldo y posterior remate de Morata. Así concluyó una eliminatoria con un solo dueño, el Real Madrid, que pasó por encima del endeble rival alemán. Muy diferente será el encuentro del próximo domingo, en el que los blancos juegan ante el Barcelona un "superclásico" trascendente. Cristiano Ronaldo de seguro llegará con hambre de goles a esa cita.
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